
Historia de Reiki
El doctor Mikao Usui vivió ocupándose por la salud de las personas. Estuvo en la búsqueda de sabiduría en la India y en el Tíbet, conociendo la medicina tradicional y natural de la cultura japonesa, y continúo en la búsqueda hasta encontrar la respuesta.
Él recibió símbolos, los cuales fue conformando como parte del método de sanación natural con el movimiento de la energía.
En la capital, Kioto, abrió su escuela, la cual llamó Reiki Ryoho Gakaii. Ahí, el doctor Mikao Usui enseña al doctor Chujiro Hayashi, a quien le pidió continuar la escuela tal como él lo hacía, trasmitiendo de maestro a alumno toda la sabiduría espiritual de reiki.
Luego de conocer los beneficios de reiki, pues mejoró su salud gracias a tratamientos en la clínica del doctor Hayashi, la señora Hawayo Takata aprendió reiki y aplicó sus conocimientos dando clases y tratamientos. Años más tarde, trajo reiki al occidente, iniciando así su difusión por todo el mundo.
En 1926, Usui murió de un infarto al corazón.
Cómo Funciona
La energía del universo pasa a través de las manos del practicante de reiki y es absorbida por el paciente en las cantidades necesarias. Durante una hora, la persona permanece sobre una cama de masaje y el reikista pasa las manos de cabeza a pies, liberando la energía que bloquea el perfecto funcionamiento.
Cuando la persona se relaja, suelta la tensión del cuerpo físico, libera la mente de pensamientos y permite que la energía realice libremente la sanación. La mayoría de las personas se duerme, recuperando así la vitalidad perdida.


Beneficios
Con reiki, la persona adquiere profundos estados de relajación; además, alcanza el equilibrio y la paz.
A nivel emocional y espiritual
Libera el estrés, la angustia, la ansiedad, la tristeza y el vacío del corazón; le ayuda a cerrar ciclos en su vida y a procesar las pérdidas, la separación y el duelo.
A nivel espiritual, puede ser un camino para su crecimiento personal.
A nivel mental
Libera la tensión muscular, equilibra las dos partes del cerebro, desaparece el insomnio y fortalece el sistema inmune. Restaura la fuerza del sistema linfático, estabiliza el nivel de azúcar, armoniza el ritmo cardiaco, nivela la presión arterial, regenera tejidos y detiene la multiplicación celular.
Estabiliza los estados alterados por alergias y reorganiza el funcionamiento del aparato digestivo, impidiendo el desequilibrio de la vesícula biliar, el bazo, el páncreas y el duodeno, con lo cual se evita enfermedades como la gastritis y la colitis.
Con reiki puedes detener una hemorragia, ayudar a la pronta recuperación postoperatoria y aliviar cualquier dolor físico.
A nivel mental
Restaura el estado alterado de energía en las conexiones neuronales, eleva la concentración y atención, revitaliza la hipófisis y el hipotálamo, eleva la frecuencia energética en terminaciones sensoriales y extrasensoriales. Asimismo, se reactivan las habilidades naturales que conectan su esencia con la utilización serena y en paz de su propia energía, esto es todo lo relacionado con el intelecto, la creatividad, la intuición y la sabiduría del corazón, activando la glándula timo.
A nivel psicológico y emocional
Baja la agresividad y eleva la compasión. Aumenta la autoestima, haciendo consiente los patrones socializantes y la carencia de atención.
Entre los beneficios, es importante mencionar su funcionamiento con los medicamentos. Ya que reiki es medicina alternativa, ayuda a diluir los efectos secundarios de los medicamentos y no se interpone a la dosis.